Todo surgió con una pregunta... ¿Qué cosas nos hacen sentir queridas? Al preguntarnos esto nos dimos cuenta que siempre pensamos que la respuesta van a ser los grandes detalles, lo trascendental, los grandes acontecimientos. Y no fue así, nos sorprendimos acordándonos de esos momentos pequeños, con las personas que queremos, de ese detalle que me regaló mi novio que me hizo sentir que pensaba en mí.

      

Nos dimos cuenta que nos sentimos queridas cuando las personas que queremos piensan en nosotras... Esos son los momentos que se quedan por siempre en nuestra memoria.
Nos quedamos pensando en lo bonito de los detalles, en lo bonito de una sonrisa, que el vaiven de estos días hace que siempre estemos a mil que siempre estemos corriendo de una lado para el otro, que es el momento de buscar una excusa para parar un poco y buscar la calma.

Entonces queríamos sacar un producto que aunque es pequeño tiene un significado fuerte, una historia, una razón de ser... Que nos incentivara a parar y leer, que nos incentivara a reconectarnos con nuestras parejas, que nos recordara que no tenemos que regalar anillos de diamantes para recordar el amor que uno siente, que a veces los detalles crean mejores experiencias.
Hoy estamos felices con el resultado de nuestros pequeños detalles de San Valentín, esperamos que a ustedes también les gusten nuestros 3 productos... Y finalmente nos respondimos la pregunta ¿el amor nace o se hace? definitivamente supimos que el amor FLORECE y que si se marchita se debe CUIDAR y regar como a una plantita que cada día recibe todo el cuidado y amor que le das.